jueves, 24 de mayo de 2007

Vuelo de fiebre

de Carmen Iriondo

- 38.1 ºC

Quisiera que los peligros se conviertan

en fusas pequeñas fusas y notas oscuras,

moscas en la pista de cinco líneas

y al fondo de las almas, otra música.


Que sonara la flauta, agudísimo rezo

para alejar esos monstruos vestidos

en la calle con la ropa bizarra

de este tiempo de morgues en la plaza.


Pero los amos dicen que callar es mejor,

aplanar toda curva del sonido imperfecto

de los gritos calantes en el fondo del miedo.


Y yo quiero esa flauta, mi vieja flauta

de oro, mis pájaros de infancia chillando

en cada puesta para negar el cielo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

yo también vuelo de fiebre pero no sé escribir.

Anónimo dijo...

Para negar el cielo.... a la flauta de oro, Carmencita!
Debería editarse ese libro de una vez por todas.

la respeto tanto pero tanto! (a usted, claro)

(a carmen también, igual)