domingo, 28 de febrero de 2010


Hoy asesiné los sentimientos de culpa,
me desprendí de la cabeza a los pies del pesado ropaje,
y herí con mi afilada desnudez de navajas el aire.
Parpaderaon los espejos
e hice la guerra con una adolescente pervertida
y fui rojo subido, el púrpura caído de la tarde.

Muchas veces fui fiera enjaulada.
El día que pueda escapar en el escapar, lo presiento,
aullará la muerte.

Vaslav Nijinsky

2 comentarios:

tze dijo...

Crece la marea la libertad. Los cambios de estación te sientan bien.
Te adoro tzi.

m dijo...

Llamame y te explico, es una pavada.